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Feb
Al llegar desde el aeropuerto encontramos un edificio moderno de fachada plana, justo enfrente de la entrada VIP al estadio Croke Park. Al entrar, la primera impresión fue la de un espacio amplio y luminoso con un toque ligeramente asiático en la madera oscura y las alfombras rojas, que eran cálidos y acogedores cuando salimos del día gris de febrero.
El Croke Park Hotel es de fácil acceso desde el aeropuerto, ya que está en el lado norte de la ciudad. La forma más rápida de llegar allí es tomar un taxi, que se encuentra a 15-20 minutos en automóvil y costará alrededor de € 20 o tal vez un poco más, dependiendo del taxi que tomes. Vale la pena descargar la aplicación mytaxi, te permite pedir y pagar un taxi en tu teléfono. La forma más económica de llegar al Croke Park Hotel, es tomar el autobús local de Dublinbus. Al salir de la terminal del aeropuerto, cruza la calle y camina por el pasillo del edificio hasta donde paran los autobuses locales. Puedes tomar un autobús número 16 o 41 desde la zona 11 y pasan cada 10-20 minutos. El coste es de 2,80 € – 3,30 € por trayecto y necesitas el cambio exacto en monedas (no en billetes) para ponerlo en la ranura de monedas al subir al autobús. Tomamos el autobús a la estación de Drumcondra y desde aquí fueron 8 minutos a pie hasta el hotel. Otra opción, la que escogimos nosotros fue alquilar un coche en SIXT Irlanda. Las carreteras en Irlanda están muy bien cuidadas y las autopistas son baratas así que puedes recorrer Irlanda e Irlanda del Norte y guardar el coche en el parking del hotel a la vuelta.
Elegimos la preciosa habitación Deluxe King con una increíble cama de tamaño gigante que agradecíamos después de las largas caminatas descubriendo Irlanda. Situada enfrente del estadio Croke Park con amplios ventanales y decorada con un estilo agradable con tonos verdes.
Nuestro desayuno se sirvió en el comedor principal del hotel, con la mayoría de las cosas distribuidas en estilo buffet, una buena selección de pasteles, quesos, fruta fresca, yogur. Había una gran variedad de platos de plata para servir llenos de tocino, huevos, tomates, champiñones y pan frito para preparar tu abundante desayuno irlandés. Yo me enamoré especialmente del Porridge, una especie de gachas de avena al estilo irlandés.
También tuvimos ocasión de probar su fantástico restaurante The Hawthron con todos los sabores de Irlanda y nos pareció delicioso. Una selección de quesos irlandeses, de cerveza Guiness, salmón para chuparse los dedos y disfrutar con todos los sentidos.
